"Me interesaba conocer el tema de la energía, me hubiera ido mejor asesorando a empresas con domicilio fiscal en las islas Caimán", ha ironizado González, que ha asegurado que dejará el puesto pese a que ha cumplido no sólo con el régimen de "las incompatibilidades legales, sino las éticas". Cuando se hizo público su fichaje se infomó de que cobraría 126.500 euros brutos por su labor.
González ha efectuado este anuncio durante la presentación pública de su libro En busca de respuestas, en la que se ha referido también a las elecciones europeas de mayo, comicios que ha considerado "determinantes", por lo que ha lamentado que la gente, según ha vaticinado, "no vaya a ir a votar". "La Unión Europea está en una situación de fracaso crítico porque hay conciencia de lo que hay que hacer, pero no hay voluntad o coraje político para hacerlo", ha esgrimido.
Durante el coloquio, el expresidente del Gobierno ha sido increpado por uno de los asistentes, que le afeó que haya "renegado del marxismo" y se preguntó "qué democracia es ésta, en la que los dirigentes están treinta años en el gobierno".
Increpado por un asistente
"¿No hay culpables? ¡hacen falta soluciones, hay hambre, me voy a morir viendo cómo la democracia se va al carajo!", ha denunciado a gritos en la sala, tras lo que ha asegurado que en Andalucía están haciendo "la misma política de recortes que el facha de Rajoy". Además, ha criticado la afición de los políticos al cargo. "Si no se va Chaves corriendo, se muere en el cargo", ha añadido en referencia al expresidente de la Junta, presente en la sala, antes de preguntarse: "¿Pero qué democracia es esta?".
González, que se ha reunido con la presidenta de la Junta, Susana Díaz, antes de este acto, al que la jefa del Gobierno andaluz no ha asistido, ha lamentado que el interpelante no hubiera hecho ninguna pregunta. Además, ha recordado que en su caso no es válida la crítica de permanencia en el cargo. "Yo respeto lo que dice, aunque lo diga así. Yo renuncié a estar en los cargos porque quise, con 54 años, hace 17 años de eso", ha dicho.
Durante el coloquio, además, ha desvelado que también renunció a los gastos de oficina asignados a los expresidentes del Gobierno, lo que hizo discretamente para no "perjudicar" al resto de exmandatarios.
Contrario a la pensión vitalicia
Tras señalar que es contrario a que los expresidentes perciban una pensión vitalicia y asegurar que nunca hubo una decisión de crearla, ha subrayado que los exmandatarios en España reciben una ayuda "escasísima para gastos de oficina", a la que él ha renunciado. "Lo lógico sería que no la hubiera y que, a renglón seguido, a ningún expresidente se le pidiera ningún servicio a la sociedad y al Estado por el cargo que tuvo", ha subrayado.
"Una pensión vitalicia para alguien que ha estado tres meses me parece exagerado, yo estuve catorce años, el periodo más prolongado de la historia -por los votos, no por las botas- y ¿eso hace mérito para tenerla?, yo creo que no", ha apostillado.
Por otra parte, se ha mostrado favorable a una reforma de la Constitución con el argumento de que "el mundo cambió y nosotros tenemos que cambiar", y ha llamado la atención sobre el hecho de que algunos de los que se opusieron a la Carta Magna estén ahora en contra de que "se toque una coma".
González, que ha dicho que con su libro pretende contribuir a abrir un debate de ideas, que considera urgente, se ha preguntado si queda alguien "para respetar -no digo para estar de acuerdo- alguien con un cierto liderazgo social, cultural o económico".
Semejanzas con Argentina
"El país está en una crisis como la de los días más dramáticos de la Argentina de 2001, donde el único tipo con sentido común, respetable, se llama hoy Papa Francisco, mientras que aquí tenemos que conformarnos con Rouco", ha ironizado.
En otro momento se ha referido al secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, para lamentar que la percepción general sea que es "viejo" y que en esta sociedad no se entienda que "hay gente de 25 años con pensamiento viejo y de 75 con pensamiento nuevo", lo que le ha llevado a concluir que la nueva sociedad será de las mujeres porque están demostrando mucha más capacidad de adaptación".
El acto ha contado con la presencia de los expresidentes de la Junta Manuel Chaves y José Rodríguez de la Borbolla, además de varios exconsejeros del Gobierno de José Antonio Griñán y los actuales consejeros de la Presidencia, Manuel Jiménez Barrios, y Hacienda, María Jesús Montero, entre otros.